Termina el verano y regresamos de las vacaciones “a la realidad”. Aunque no me gusta nada esa frase, porque pobres quienes “su realidad sea triste” y no luchen por hacerla feliz, dicen que quien trabaja en lo que ama ya no trabaja más. Bueno, no nos pongamos tan filosóficos. Hablemos de alimentos que nos relajarán.
Para lograr un estado de relajación es necesaria la participación de nuestro cuerpo, mente y alma. De poco sirve relajar el cuerpo si la mente esta alterada y viceversa. El alimento influye en el cuerpo, pero no crean, también en la mente, en neurotransmisores, liberación de hormonas, endorfinas.
A continuación proporcionamos una lista de seis alimentos que conllevan a un estado de relax. No son los únicos, hay muchos más, pero para empezar no está mal.
Semillas de aceite de linaza. Se ha observado que su alto contenido de ácidos grasos omega tres contribuye a la buena salud cerebral. El cerebro está constituido en buena parte por componentes lipídicos, por lo que, como “picoteo”, golosina, o añadidas al yogur, son estupendas. Son usadas también en enemas.
Almendra. Se sabe que favorece la buena salud del corazón. Desde la antigüedad ha sido consumida por sus propiedades energéticas, porque hacía “sentir bien a la gente”. Sus grasas son buenas para nuestra piel, y todos son componentes –vitaminas del complejo B, hierro, fósforo, calcio- contribuyen al buen estado general.
Las pasas. Golosina más barata y nutritiva no puede haber ¡Sí señor! Además de ayudarnos a una buena digestión y ser un buen laxante –que ya es mucho- , las pasas son ricas en vitaminas B1 y B6 lo que contribuye a la estabilidad de nuestro sistema nervioso. A los fumadores este fruto les viene de perlas por los efectos oxidantes del cigarro y los antioxidantes de las pasas. Eso sí, fumadores y no fumadores deben acompañarla con mucha agua. Como todos los frutos secos.
Plátanos. Todos hemos visto a Rafael Nadal y otros deportistas consumir siempre plátano, ya que combate los calambres. Sus altas cantidades de magnesio y la presencia de melatonina y serotonina contribuyen a que nuestro cuerpo se relaje.
Té. Todos sabemos sobre las propiedades del té, y lo asociamos siempre a relajación, meditación, etcétera. Pero no sólo el té; infusiones como tila, melisa y albahaca contribuyen mucho a nuestra relajación. Además es muy fácil de hacer: agua caliente, una bolsita de la infusión preferida y listo.
Leche tibia. El único problema conforme uno va ganando años es la dificultad para metabolizar la lactosa, pero ya existe leche deslactosada para estos casos. Otra cosa, no hay que abusar de ella, se puede decir que pasada la adolescencia ya no es necesaria, el calcio se puede obtener de otras fuentes. Bueno, estamos aquí para hablar bien de ella. La leche tibia nos relaja, y si se le añade miel, el sueño casi está asegurado.
¿Ustedes conocen otros alimentos relajantes o anti estrés? Esperamos que los compartan con el resto de nuestros lectores. Saludos.