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Dejar de fumar antes de quedar embarazada no sólo es un gesto destinado a proteger la salud del feto, sino que también es indispensable para lograr la fecundación.
Dejar de fumar antes de quedar embarazada no sólo es un gesto destinado a proteger la salud del feto, sino que también es indispensable para lograr la fecundación.
Los efectos nocivos sobre la salud general
En el hombre:
- Disfunción eréctil (que desaparece cuando se suprime el tabaco)
- Alteración de la movilidad de los espermatozoides
- Disminución del número de espermatozoides
- Aumento de espermatozoides anormales
- Alteración del ADN de los espermatozoides
- Aumento del número de glóbulos blancos en el esperma, factor de hipofertilidad
En la mujer:
- Descenso del número de ovocitos
- Descenso del número de óvulos liberados
- Aumento del número de ovocitos anormales
- Retraso en la concepción, lo que es directamente proporcional a la cantidad de tiempo que se fuma y el número de cigarrillos que se consumen al día (el efecto es reversible cuando se suprime el tabaco)
- Adelantamiento en unos dos años en la edad de la menopausia
Cuando la madre o el padre fuman el riesgo de infertilidad en la pareja aumenta; de manera que es esencial suprimir el tabaco antes de buscar un embarazo. De hecho, fumar sería una de las razones por las que muchas parejas recurren a la fecundación in vitro. Sin embargo, el cigarrillo también puede impactar negativamente en la eficacia de esta técnica.
Los efectos nocivos del tabaco sobre la fecundación in vitro son conocidos. De manera general, se obtienen menos embriones en las fumadoras y los índices de implantación son peores. Los índices de concepción serían dos veces menores en las mujeres fumadores y los índices de embarazo final (normalmente de un 20%) descenderían a un 15% en las mujeres que se encienden más de 10 cigarrillos al día.