Los endulzantes de bajas calorías ayudan a bajar de peso sin generar hambre
Los endulzantes de bajas calorías realmente parecen ayudar a bajar de peso. Las personas que los utilizan logran reducir su ingesta calórica y no comen de más para compensar, concluyó una investigación médica
"Cuando son usados como parte de una alimentación sana, los endulzantes de bajas calorías y los productos dietéticos pueden ser herramientas muy útiles para ayudar a que las personas controlen su ingesta calórica y su peso", dijo Beth Hubrich, la autora principal.

KILOS PELIGROSOS
Estos resultados pueden ayudar a muchas personas en todo el mundo, ya que tanto el sobrepeso como la obesidad atentan contra la salud y la calidad de vida de la gente. De hecho, la Organización Mundial de la Salud calcula que 2,6 millones de personas mueren por año a causa de las complicaciones de salud que generan estas dos patologías.
Entre los muchos problemas que causan se cuenta el aumento en el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, diabetes, artritis, depresión y algunos tipos de cáncer. Los especialistas aseguran que bajar un 5% a 10% del peso corporal sirve para prevenir muchas de estas serias complicaciones de salud.
ENDULZANTES QUE FUNCIONAN
Hubrich explicó que encararon la presente investigación porque recientemente se cuestionó la utilidad de los endulzantes de bajas calorías y los productos que los contienen, alegando que no sirven para bajar de peso porque presuntamente generan hambre y una mayor ingesta de comida.
La especialista trabajó con personas sanas de peso normal y con adultos con sobrepeso. Los voluntarios comieron una entrada con azúcar, aspartame o stevia, siendo estos últimos diversas variedades de endulzantes dietéticos. A continuación, cada individuo se sirvió un plato principal de un tamaño elegido por él mismo.
Los autores del estudio notaron que los participantes que tomaron aspartame o stevia consumieron menos calorías y no tendieron a comer de más o a sentirse hambrientos.
"En conclusión los voluntarios no compensaron comiendo de más en el almuerzo o en la cena y lograron un mismo nivel de saciedad, independientemente de si tuvieron una entrada con azúcar o con un endulzante de bajas calorías", dijo Hubrich.